Análisis Race the sun

Plataforma: PC

Desarrollador: Flippfly

Editor: Flippfly

Fecha de lanzamiento: 19 de agosto de 2013

Género: Velocidad

Si hay un tipo de juego que últimamente está más de moda son aquellos diseñados para echar una partida rápida, sin historias ni florituras, intentando obtener cada vez una puntuación o distancia superior. Es en el mundo móvil donde estos juegos florecen, y su estela pronto se ha extendido a otros lugares como Facebook o las propias aplicaciones de los navegadores.

Race the Sun 1

Race the Sun pertenece a este género  y rebosa originalidad en su envoltorio más que en su mecánica, lo cual no quiere decir que no nos encontremos ante una propuesta jugable refrescante y divertida, pese a carecer por completo de historia o finalidad.

 

Fly Me to The Sun

El objetivo del juego no podría ser más sencillo.

Debemos pilotar una brillante nave solar lo más lejos posible antes de la puesta del Sol. Por supuesto, no será una tarea tan sencilla como a priori pudiera sonar. El camino estará divido en regiones plagadas de obstáculos, cada una más complicada que la anterior. La senda a seguir es completamente libre, pero debemos tener cuidado porque, dependiendo del camino elegido, podemos acabar antes con nuestros huesos en alguna pared.

Race the Sun juega mucho con la recompensa al esfuerzo, y lo hace de varias maneras.

Existirán logros que nos permitirán subir de nivel a nuestra nave, lo que se reflejará en el juego en forma de mejoras para la nave y objetos que podremos recoger, desde potenciadores para elevarnos durante varios metros por encima de los obstáculos a aceleradores que además retrasarán el ocaso, algo indispensable si no queremos quedarnos varados en mitad del camino. Estos objetos se suman a los ya clásicos de puntuación, los cuales nos proporcionarán puntuaciones cada vez más altas gracias a un multiplicador que aumentará a medida que recojamos más y más, y que disminuirá si alguna de nuestras alas impacta con algún obstáculo.

Y hablando de obstáculos, estos pasarán de ser pequeños resaltos o colinas en las primeras regiones a paredes colosales en las siguientes que no solo estarán dispuestas con muy mala intención, sino que además se vendrán abajo o cambiarán de posición en el ultimo momento intentando que nuestro viaje acabe de la manera más violenta posible, por no olvidar que a partir de cierto momento incluso se nos lanzarán misiles que nos cegaran durante varios segundo, más que suficientes para comernos alguna pared. Por suerte, algunas regiones pueden ser evitadas por completo gracias a teletransportadores o a portales interdimensionales que nos llevarán al espacio, un lugar mucho más tranquilo donde no tendremos que preocuparnos por la caída del Sol.

Como decíamos antes, se premia al esfuerzo, pues el elegir un camino u otro dependerá de qué objetivo queramos lograr. Habrá unos que contendrán muchos más puntos mientras que otros nos permitirán alargar la duración del día o incluso encontrar un portal de acceso directo al final del nivel. Cuanto mejores sean las recompensas más complicado será avanzar, así que de nosotros dependerá si nos compensa meternos en camisa de once varas.

Ah, y no penséis que será cuestión de aprenderse el mapa porque, cada 24 horas, este cambiará por completo, por lo que el riesgo de cada nueva ruta estará siempre presente.

Race the Sun 5

Deslumbrante pero simple

A nivel visual nos encontramos con una de cal y otra de arena. Si bien el juego está pensando para ofrecernos un aspecto gráfico minimalista, eso no empeña el hecho de que quizás podían haberse pulido algunas aristas, y nunca mejor dicho.

El problema es que su simpleza juega en su contra. El juego nos presenta una iluminación excelente, mientras el sol va cayendo. Es mas fácil prever los obstáculos gracias a las cada vez más alargadas sombras. Por su parte, los reflejos sobre la nave también están muy conseguidos para ser un juego indie.

Sin embargo, las formas y obstáculos no solo están carentes de toda textura sino que su diseño es extremadamente poligonal. Esto no seria un problema si con ellos se hubieran construido diferentes estructuras y obstáculos, pero una vez que hayamos jugados una docena de veces no encontraremos nada que nos sorprenda, siempre veremos los mismos túneles, los mismos obstáculos y los mismos saltos.

Ni siquiera tiene unos fondos con los que deleitarnos, aunque bien es cierto que a partir de cierto momento no pensaremos en otra cosa que esquivar los innumerables escollos que se nos vienen encima.

Race the Sun 4

El sonido del atardecer

Race the Sun no tiene una banda sonora demasiado extensa, de hecho sólo contiene 5 temas, los cuales irán de menor a mayor tensión conforme vayamos cruzando regiones (y una de ellas es para el preludio de las mismas). Estos temas encajan como un guante durante todo el trayecto (si el Sol esta a punto de ponerse la melodía cambiará a otra aun más agobiante) aunque no serán temas que vayamos a recordar y se limitan a cumplir sin más.

Lo que ocurre es que cuando hemos cruzado las 4 primeras, volvemos al primer tema y se pierde parte de la tensión, puesto que nos encontramos un quinto nivel mucho más complicado pero con una música que anima a bajar el ritmo. De todas formas, el juego está en continua actualización y es posible que en un futuro aumente su banda sonora.

Por otra parte, los efectos de sonidos son muy escasos, casi podríamos contarlos con los dedos de las manos. Coger un ítem, chocar, estrellarse, oir una explosión y poco más. No es que el juego necesite muchos más pero tampoco son de una calidad excelsa. Al menos son suaves y no se hacen pesados.

Race the Sun 3

La llanura infinita

Uno de los grandes valores del juego es su duraciónRace the Sun durará hasta que nos aburramos de él, simple y llanamente.

Por un lado tenemos su infinito modo arcade, y por otro su modo Apocalypse, un modo donde morir en 5 segundos es lo más común y solo apto para auténticos ases del aire con reflejos felinos (momento muy curioso la primera vez que en este modo la paloma que suelta bonus al final de cada región nos suelta un muro en toda la cara, haciendo que nos quedemos con cara de no saber que acaba de pasar) y donde el ocaso ve su tiempo disminuido notablemente.

Pero si algo puede hacer que le dediquemos horas y horas es su editor de mapas: simple, rápido y completo. Nos permitirá crear mapas de todo tipo y compartirlos con los demás, y es aquí donde el potencial del juego parece haber sido más exprimido por los jugadores que por los propios desarrolladores.

Encontraremos mapas de saltos, llenos de niebla, de colores, psicodélicos e incluso llenos de adorables y gigantes conejitos rosas que desean aplastarnos. Sin duda, ha sido un gran acierto que consigue que el juego gane bastantes enteros con respecto a su premisa original.

Race the Sun 2

En la superficie del Sol

Race the Sun, es un juego que lamentablemente podía haber llegado a mucho más. Su estilo tanto visual como de juego eran muy prometedores pero su uso se ha quedado en la superficie, y eso es una pena.

La sencillez y repetitividad del título juegan muy en su contra y es precisamente la comunidad de creadores la que le salva la papeleta. A pesar de todo, es divertido y como todo juego de este estilo, “pica” al jugador a conseguir mejores marcas, puntuaciones y más logros.

Race the Sun en Greenlight.
Página oficial para información y compra.

[analisis imagen=”https://tecnoslave.com/wp-content/uploads/2013/09/race-the-sun-portada-285×142.jpg” jugabilidad=”8″ historia=”-” graficos=”7″ sonido=”6″]

Compártelo

Victor Manuel Sánchez

Apasionado del cine y de, por supuesto, los videojuegos. Gestor telefónico hasta que mi diplomatura de empresariales me consiga algo mejor. Todo lo audiovisual me fascina, cómo imágenes y sonidos creados por las personas pueden llegar conmover. Mis primeras emociones jugonas fueron con una Atari, pero no fue hasta la llegada del erizo azul en la 16 bits de Sega cuando realmente me enamoré de este mundo, ahora podía formar parte de aquellas aventuras e historias. No tengo género preferido, tengo estilos preferidos, y maravillas como Shadow of the Colossus, Portal o Limbo no hacen más que reafirmarme en mi opinión de que estamos ante el nacimiento del décimo arte.

Siguiente entrada

Nueva expansión para Company of Heroes 2

No hay comentarios

deja el tuyo