Los juegos de terror existen, y por desgracia, el terror se puede manifestar de varias maneras. Si habláramos de un juego donde los sustos, la tensión y la supervivencia abundan, podríamos tal vez divertirnos, pero cuando hablo de terror en este análisis es por el simple hecho de que horripila la puesta en escena de Kick-Ass 2; al menos a mí.

Tras la película en 2013, no supimos nada más de Kick-Ass 2, y a pesar de que a un servidor le costó mucho ver ese largometraje tendido en la incomprensión del guión, recordé que el cómic sí me había gustado, y de hecho bastante. Fue entonces cuando supe de la salida del juego y me dispuse a analizarlo para sacar estas conclusiones que veis a continuación. Como dirían en la serie Goosebumps: temblad muchachos, temblad, que miedo vais a pasar. 

Plataformas disponibles: PS3, Xbox 360, PC

Versión analizada: PS3

Género: Acción

Desarrollador: Freedom Factory

Distribuidor: Badland Games

Fecha de salida: 11 de julio de 2014

Idioma: En inglés, con subtítulos e interfaz en español

Precio: 34,99€

Caída contra el suelo

Los amantes del cómic, lanzado en 2010, recordarán la historia en la que una vez más Dave Lizewski -nuestro protagonista- deberá enfrentarse al villano Motherfucker. Bien, pues el juego no guarda más que esa similitud con el cómic o incluso con la película, porque todo puede ir a peor.

Desde un primer momento notamos que el juego posee una historia que no atrapa tanto como lo podría hacer el cómic, y además para colmo, posee un ritmo de juego lento, tedioso y que impide disfrutar de un videojuego como debería ser correcto. Además, y para colmo, un juego de su estilo posee infinitos fallos a la hora de la jugabilidad y del rendimiento, por no contar los añadidos al videojuego que se quedan como meras anécdotas, y mejor que sea así.

En un primer momento sabemos que nos encontramos ante un título dotado de una experiencia jugable bochornosa, con combos muy limitados, y unos movimientos toscos que impiden a un juego del género añadirle velocidad y, en definitiva, ser frenético y divertido. Dos botones se encargarán de hacer todos los combos, y si eso fuera poco, añade que los golpes sean dados con una efectividad dentro del tiempo adecuado para que el combo se ejecute, una cosa totalmente fuera de lugar.

Cuando estamos explorando el mapa, podemos observar -aparte de los inmensos fallos gráficos que explicaré más adelante- una repetición de los escenarios en los que los enemigos aparecerán en tropas de cuatro en el 80% de las ocasiones. La inteligencia artificial se queda a un nivel horroroso y desde aquí salpica la falta de interés por hacer bien a los enemigos, con unos golpes predecibles que se esquivarán simplemente pulsando un botón. Y así todo el juego.

Gráficos y sonido

Pensaréis a estas alturas que el juego es un auténtico varapalo para los amantes de la saga y, en definitiva, para los amantes de los videojuegos, pero es que el telón aún no ha caído y queda lo mejor, o en este caso lo peor de la obra que os estoy dando a conocer.

Kick-Ass 2 es uno de los peores juegos en cuanto a gráficos que han pasado por mi mano. Un patético manejo utilizando el cell shading a su diseño de niveles -en ambas cosas flojo-, y requiere de lupa para fijarse de algunos detalles de lo mal pulidos que están. Por otro lado, tenemos su constante bajada de frames que evita disfrutar del juego en su totalidad, dado que de 30 FPS, puede bajar perfectamente a los 14 FPS y quedarse tan tranquilo así un buen rato.

En el diseño de los enemigos, se nos ofrecerán unos sprites muy parecidos entre sí, concluyendo un elenco de personajes calcados y sin el mínimo ápice de originalidad por parte de los diseñadores, lo cual es una verdadera lástima. Como añadido también hay popping, clipping, y constantes bugs como el que no podamos dar a los enemigos al atacar, lo que corta la experiencia de juego de una manera catastrófica.

Si esto fuera poco, la cámara ofrece un punto negativo más al videojuego, ofreciendo una cámara que nos dejará vendidos en plena pelea cuando choquemos contra una columna, o en definitiva, contra un objeto que nos impida ver correctamente la acción que estemos disputando en ese momento. Todo un gran acompañante para los demás fallos que tiene el título.

Lo musical y lo sonoro resulta repetitivo y cargante; los gritos de los enemigos son los mismos, el doblaje es malo y no ofrece carisma, y para colmo la música que suena es la misma todo el rato -a excepción de la del menú principal, que sí está bastante bien.