En el estruendo de la batalla
Hace ya muchísimo tiempo que me resulta complicado condenar a un juego por su mala calidad sonora o por lo menos en el apartado de los efectos, ya que hace ya años que el protagonismo de la lucha de las tarjetas de sonido por lograr la mejor fidelidad ha perdido completamente la razón. Hoy en día cualquier tarjeta es capaz de reproducir con calidad todos los sonidos que se deseen, quedando este mercado reducido a los profesionales de dicho medio o aquellos que desean tener equipos, ya no de alta fidelidad, sino que me atrevería a decir de extremísima fidelidad sonora. Por lo que en el apartado de efectos especiales el juego cumple con todo lo esperado, es decir, explosiones fuertes y retumbantes, sonidos viscerales y viscosos al despachurrar alienígenas malvados y lastimosos gritos de muerte y dolor por parte de nuestros marines al ser herido o asesinado.
Por desgracia, el juego no tiene voces de ningún tipo, algo que en cierto modo se echa en falta, pues hoy en día todo suele tener doblaje. Algo que en cierto modo me obliga a tener que rebajar un poco mi nota en este apartado (aunque algunas veces más vale ominoso silencio que un doblaje anodino o mal realizado).
Otra de las pegas (ya que no fallo) es que el juego se encuentra completamente en inglés, algo que no afecta a penas la jugabilidad del mismo, ya que todas las misiones suelen mostrar de manera gráfica el objetivo de las mismas, pero que a estas alturas incluso el mercado “indie” debería de ir teniendo en cuenta nuestro idioma.
Cumpliendo los objetivos de la guerra
Una de las cosas que más me ha gustado es la sencillez de jugabilidad. Como ya he dicho al principio, el juego mezcla tres géneros y lo hace de manera magistral, encontrándonos ante un juego de estrategia de “escuadrones”, es decir, no es un juego de gestión de grandes ejércitos (tipo Wargames) ni microgestión (tipo Strarcraft o Command and Conquer). Aquí se nos da un equipo de soldados que deben de cumplir determinados objetivos para superar el mapa. Estos pueden ser tan sencillos como destruir y conquistar bases enemigas, llevar determinado objeto del punto A al punto B, proteger zonas, etc. En algunas misiones nos veremos obligados a tener que cumplir varios de los objetivos a la vez, con lo que la cosa, como cabe esperar, irá complicándose en las misiones más avanzadas.
El juego nos proporcionará cierta cantidad de puntos de recurso cada vez que destruimos y conquistamos una base enemiga por primera vez o cuando recogemos contenedores de equipamiento. Estos puntos podremos invertirlos en añadir alguna que otra unidad más al equipo ya desplegado, dar mejor equipamiento a nuestros marines, instalar armas automáticas (tipo las torretas de la película Aliens: El Regreso) o construir instalaciones auxiliares que nos ayuden a completar la misión.