Impresiones GoD Factory: Wingmen

Nine Dots es un pequeño estudio situado en Quebec, Canadá. Son los desarrolladores de Brand, un plataformas 2D Indie poco conocido, que salió a la venta el 17 de Mayo de 2012 y del cual se puede obtener una copia por unos 3,5€ a través de la plataforma Desura. Actualmente están trabajando en GOD Factory: Wingmen, un juego de acción, estrategia y simulación que ahora mismo se encuentra en Steam Greenlight  y al cual se le puede votar (Pulsad aquí si queréis apoyarlo).

En GOD Factory: Wingmen nos adentramos en una batalla espacial entre cuatro razas. En cada batalla lucharán dos de ellas con auténticos acorazados. Armados con multitud de torretas que disparan a todo lo que se acerque, generadores de escudo, radares, etc. El objetivo de ambas naves es destruir tres partes de la nave contraria y para ello usan su grandes láseres para ir disminuyendo, muy poco a poco, sus niveles de energía.

El estilo de juego recuerda mucho a los combates en el espacio del Star Wars Battlefront. En ellos los distintos cazas atacaban a las naves de los enemigos, introduciéndose dentro de ellas, para destruirlas. En GOD Factory: Wingmen no hay que entrar dentro para destruirlas, todo se hace desde fuera, en el campo de batalla.

Cada nave de cada raza tiene dentro del grupo tiene su propio rol, puede ayudar o atacar. Se dividen en:

• Los Humanos, como siempre, tiran a naves más clásicas, como esta, la cual está especializada en hacer daño:

• Por otra parte, tenemos a los Guantri, en este caso una Guantri Support, con más resistencia y escudo, es el healer del escuadrón:

• No podía faltar la nave ágil para llegar rápidamente a los sitios y esquivar los ataques del enemigo con relativa facilidad. De la raza Ar, tenemos esta nave potenciada en el turbo:

• Solo falta una, y es el tanque. Con la forma humanoide característica de su raza (Chorion), es ideal para el primer frente de batalla:

Por el momento, no hay más información respecto a la historia de cada raza, ni que las lleva a enfrentarse, o colaborar, unas con otras.

Dentro de todos los roles que hay, cada raza tiene sus propias formas de atacar, unas atacan con ametralladoras y otras con láseres. Antes de empezar la batalla, e incluso desde el menú principal se puede acceder al hangar. En dicha opción se puede modificar la nave para que tenga más o menos escudo, más o menos munición, más o menos tiempo de recarga, etc.. Al modificar dichas partes, el aspecto de la nave cambia radicalmente, pero no hay que guiarse del aspecto ya que una nave muy bonita puede ser una lata en el campo de batalla.

GOD Factory: Wingmen tiene un control muy bueno. Se puede jugar tanto con teclado, con joystick o con mando de pc (incluido el de Xbox 360). Los controles son completamente ajustables y permiten acomodarlos como uno quiera, incluso permite la combinación de varios de ellos para realizar movimientos que permiten esquivar.

Al ser el campo de batalla el espacio, puede parecer que no hay nada mas que vacío y soledad, pero no. Durante las peleas hay que tener en cuenta que existen una gran cantidad de obstáculos esparcidos por el espacio, ya sean asteroides o restos de naves, un planeta al que parece que se puede ir usando el turbo de la nave y dos grandes estatuas de dioses que parecen estar en plena pelea. Los acorazados tienen una forma más simple, no tienen demasiados detalles y su forma es más bien redondeada. Como el espacio es inmenso y el campo de batalla también es bastante grande, solo hay posibilidad de ver las naves enemigas cuando se enfrentan cara a cara.

GOD Factory: Wingmen tiene una OST que te sitúa inmediatamente en un universo alternativo, rodeado de dioses de piedra. Pese a ser repetitiva, y propia de un juego en Alpha, está muy bien a la par que disparas lasers con tu flamante nave.

Cabe destacar también que el sonido de misiles, láseres y efectos en general se escuchan bastante bien, principalmente, por el lado que viene/impacta. Si te están disparando a la derecha de la nave, lo oirás en gran mayoría por el oído derecho.

Las naves tienen dos cámaras distintas, en primera y en tercera persona. En primera persona, la cámara estará situada en la cabina del piloto y desde ahí se podrá controlar todas las barras de energía, munición, etc. Lo mejor que tiene la vista en primera persona es que introduce al jugador en el juego. En tercera persona esas barras estarán en el Hud. Lo bueno de esto es que se controla mejor el campo de batalla.

De momento solo hay un modo de juego, el combate para destruir los acorazados, pero en un futuro es posible que añadan nuevos modos para hacerlo aun más adictivo y no que un juego lineal.

GOD Factory: Wingmen actualmente se encuentra en estado de Alpha. Hay que decir que para aun estar en esta fase de desarrollo se puede jugar muy bien y es entretenido. Puede que le falte perfilar algún que otro detalle, pero si se hace bien (va bien encaminado), puede ser un juego bastante adictivo. Un detalle que hay que destacar es la posibilidad de usar el dispositivo “Oculus Rift”, el cual, cuando salga a la venta, seguro que da mucho juego.