Los videojuegos españoles en Madrid Games Week

En la feria Madrid Games Week no solo pudimos probar a las grandes compañías como Sony o Microsoft. En un lateral del pabellón, cual galos rodeados de romanos, resisten nuestros desarrolladores españoles. No os dejéis engañar por el stand minúsculo que les proporcionó la organización, estos chicos hacen videojuegos y saben lo que hacen.

• Deconstructeam: Presentaron Gods will be watching, un juego sobre decisiones, moral, dilemas… con el objetivo de sobrevivir en un entorno en el que no solo contará la resolución del puzzle, sino también el enfoque ético que le demos al problema. No perdáis del punto de mira a este equipo.

• Beautifun Games: los creadores de Nihilumbra no podían faltar al Madrid Games Week. Su juego, que ya ha recibido multitud de premios, se está preparando para dar el salto a consola en colaboración con Nintendo y Wii U.

• Teku Studios: Quizá la presentación más bonita de los juegos mostrados. Candle, el juego de Teku Studios, está dibujado y animado completamente a mano. Sí, no me he vuelto loco. Los escenarios, los personajes, prácticamente todo está dibujado en acuarela e integrado en el juego, lo cual le da un aspecto completamente diferente a nada que hayamos visto hasta ahora. Tendremos que esperar a primavera para verlo, pero seguro que tendremos una demo antes.

• Evil Mind: Los creadores de Extinction y Cold War estuvieron presentes en la feria, mostrando sus juegos y realizando algunos sorteos de pósters y camisetas. No dejéis de probar sus juegos, son gratuitos.

• Crazy Belts: Tambien contamos con la presencia de Crazy Belts, juego que parte de la base de la incógnita sobre qué pasará cuando dejamos nuestros equipajes en el aeropuerto. El juego está disponible para PC, Mac y Linux. ¡No dejéis de echarle un vistazo!

Esta muestra del panorama en el desarrollo de videojuegos en España deja patente que sí podemos crear. Y no solo crear, en España somos capaces de crear grandes juegos sin apenas apoyo. Espero que después de esta feria, en la que han puesto las cartas sobre la mesa con un gran grito de “¡Podemos!” se dediquen cada vez más recursos para el apoyo de estos estudios que sobreviven de la nada y crean auténticas maravillas.

Gracias a Luis Gutiérrez por la fotografía.