Análisis Ergo Proxy

¿Vivir en una mentira o afrontar la verdad? La serie nos sumerge un un mar de preguntas.

¿Acaso existe una fuerza divina que guié nuestros actos? ¿Acaso nuestro destino está escrito desde que nacemos? ¿Cuál es nuestra “verdad”? Desde luego muchas preguntas surgen con eso que llamamos “vida”, y a lo largo de ella surgen muchas más en eso que llamamos comúnmente “camino, recorrido o senda”. Si a esas preguntas les sumásemos otras tantas estaríamos a medio camino del tema que nos atañe, faltaría un marco en el que situarlo: un mundo postapocalítico. Y solo nos quedaría envolver todo con un toque sombrío, oscuro y enigmático y entramos de lleno en la atmósfera creada para esta serie, entramos en el mundo de Ergo Proxy.

Nombre original: Ergo Proxy

Estudio de animación: Manglobe

Año de publicación: 2006

Versión utilizada para el análisis: DVD

Género: Acción, Psicológico, Ciencia Ficción

Clasificación: No recomendada para menores de 13 años

Otras características de la edición analizada:

Audio: Castellano, Japonés

Subtítulos: Castellano

Número de discos: 6 (5 de la serie más otro con extras)

Número de episodios: 23

Duración del volumen: 595 min.

Shuko Murase, director de la serie, se basó en dos cosas para poner el título a la serie:

Primero en la famosa frase de Descartes “Cogito ergo sum”, el famoso “Pienso luego existo” que nos dejó el filósofo. Supone los cimientos, no sólo para el título, sino también para la serie notándose la “sombra” en cada capítulo y a medida que se desarrolla la trama.
En segundo lugar utiliza la palabra “Proxy” que significa agente. Está palabra también cobra bastante importancia, se le da una razón de ser en la obra.

Con el misterio del título resuelto, y los elementos que se eligieron para crear el universo de la serie mencionados anteriormente, llegó la hora de adentrarnos más a fondo en Ergo Proxy.

Argumento

La historia se desarrolla en un mundo apocalíptico devastado por una antigua guerra nuclear, siendo imposible la vida por el aire tóxico que se desprende. En medios de este caos fue concebida Romdo, una ciudad cúpula utópica donde los humanos coexisten junto a las androides o autoreivs en paz estando controlados por el gobierno. La ciudad debía ser una paraíso idílico pero esta idea esta bastante alejada de la realidad, Romdo es un lugar oscuro y deprimente en la que los sentimientos humanos han sido desechados: “Un paraíso en el que las emociones son innecesarias”. Con este panorama se crea la idea de “ciudadano modelo” bajo la frase de: “Los ciudadanos modelo obtienen cosas pero la vida es más fácil cuando se deshacen de otras, incluso de las que le son necesarias”.

Cada humano tiene asignado un autoreiv desde su nacimiento a modo de asistente, conocido como Entourages, para guiarle y hacer que se convierta en un autentico ciudadano ejemplar; gracias a ellos los humanos desconocen el significado de la palabra “crimen”. En el transcurso de esta vida carente del sentir, la utopía se ve afectada por una serie de asesinatos hechos por autoreivs fuera de control infectados por un virus conocido como Cogito que permite a los autoreivs experimentar las emociones y tener autoconciencia. Debido al virus, la ciudad comienza a desmoronarse y perder el equilibrio establecido. La detective del servicio de inteligencia Re-L Mayer será la encargada de investigar una serie de extraños asesinatos que han ocurrido en el seno de la sociedad, y accidentalmente se topa con un mensaje que le advierte de que algo va a “despertar”; momentos después es atacada por una monstruosa criatura que no es ni humana ni androide. Poco tiempo después descubre que a esa criatura la llaman Proxy, una forma humanoide con la que el gobierno estaba experimentando con la idea de que posee la clave para la supervivencia de la especie humana. Todo acerca del Proxy es llevado con un secreto total por el gobierno y llevará a nuestra protagonista a buscar las respuestas incluso más allá de los límites de la cúpula.

El argumento de Ergo Proxy resulta algo complejo y desconcertante, y a medida que va avanzando la trama se va complicando cada vez más. La historia no se puede decir que vaya en una sola dirección, va cambiando constantemente el flujo narrativo y eso lo hace interesante, cada personaje es único a su estilo. El transfondo que tiene detrás es, sin lugar a duda, lo más llamativo de esta serie, rotando los temas a contar tanto filosóficos como políticos, entre otros muchos, en cada capítulo. Sumergiéndonos y entrando de lleno en la piel de cada personaje nos surgen incógnitas que solo nosotros podemos contestar, al igual que ellos con el avance de su camino. La idea de Ciudadano modelo y el Cogito son dos términos irónicamente expuestos en la serie, uno inhibe los sentimientos y otro hace que las maquinas sientan, esto da bastante juego en la historia y es una de las causas directas de la caída del sistema de la ciudad.

Animación

Hoy en día la animación se apoya bastante en los ordenadores para crear la ambientación de series y películas, si a esto se le suma una buena temática se pueden crear cosas realmente asombrosas. Se puede decir que la creatividad nace de la mente humana y ese el punto clave de la animación, por muchos retoques por ordenador que tenga. En este caso, la animación fue llevada a cabo por Manglobe (Estudio que también se encargo de Samurai Champloo o Deadman Wonderland). Nos encontramos ante una serie con paisajes desolados, oscuros y con poco brillo reflejando fielmente la temática y estética de la obra.

Aunque el movimiento de las cinemáticas transcurra casi siempre en la oscuridad el buen uso de las luces y el acertado enfoque hacia el personaje clave hacen que no sea difícil ver lo que esta pasando. Los personajes tienen ese rasgo de cómic americano que el director buscaba para su obra, dando un toque de frescura e innovación. En definitiva la parte artística esta muy bien cuidada y trabajada, tanto el diseño de los personajes como los paisajes e incluso las escasas ciudades que nos encontramos.