Analisis Ratón Razer Mamba

Gracias a Razer he tenido la oportunidad de probar el Razer Mamba, un producto que no me convencía del todo, ya que no tenía cable y eso podía causar cierta pérdida en el envío de información. Además, el hecho de ir por batería, me hacía pensar que no duraría mucho en juego. ¡Nada que ver con la realidad! No quiero desvelar el análisis desde el principio, pero si que diré que mi opinión sobre este ratón ha cambiado radicalmente, y para bien. ¡Vamos con el análisis!

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Quizás los que no hayáis probado un ratón inalámbrico anteriormente no penséis como yo, pero es cierto que según el ratón que utilices puede llegar incluso a desconectarse en mitad de una partida. Con el Razer Mamba no pasará eso, y lo he usado por bastante tiempo en todo tipo de juegos, y su respuesta ha sido más que satisfactoria en el 100% de los casos.

Datos básicos

Fabricante: Razer

Web del fabricante: http://www.razerzone.com/es-es

Ficha del producto: http://www.razerzone.com/es-es/gaming-mice/razer-mamba

Precio: 129,99€

Especialización: Gaming en general y FPS.

Especificaciones

  • Tecnología inalámbrica con calidad para juegos
  • Sistema de sensor dual HG de 6400 PPP
  • Razer Synapse 2.0 activado
  • Funcionalidad de doble modo con cable/inalámbrico
  • 1000 Hz Ultrapolling con 1 ms de tiempo de respuesta
  • Luz multicolor
  • Hasta 5 m por segundo* y aceleración de 50 g
  • Dimensiones aproximadas : 115 mm (Largo) x 68 mm (Ancho) x 43 mm (Alto)
  • Peso aproximado : 136 g
  • Duración de la batería: Aprox. 16 hrs (juego continuo)

Presentación

Como era de esperar viniendo de Razer, el envoltorio de este periférico resulta bastante sorprendente, quizás uno de los mejores que he visto hasta ahora, pues muestra al ratón en un pequeño pedestal que lo hace destacar por encima de otros productos.

El ratón se encuentra dentro de una vitrina transparente de metacrilato, que permite ver tanto el ratón como su pedestal. Justo debajo podemos encontrar tres cajones hechos de cartón dentro de los cuales tenemos la batería, el cable USB y el cargador del ratón.

Podría decirse que el diseño del exterior ha sido todo un acierto en este caso por parte de Razer, pues han sabido aprovechar la ausencia de cable directamente conectado al ratón para mostrar la estética del mismo, de la cual hablaremos más adelante, ocultando los cables que siempre terminan por estropear un poco la imagen.

Calidad técnica

Como ya he comentado anteriormente, tenía mis dudas con respecto al correcto funcionamiento del ratón, debido a la ausencia de cables. Al tratarse de un periférico gamer debe tener una capacidad de respuesta muy alta, además de no perder información en ningún momento, pues puede estropearte una partida, y estamos hablando de un ratón de gama alta.

Pues bien, olvidad todo el párrafo anterior, cumple perfectamente con todos los requisitos que se pueden exigir de un ratón de esta categoría, incluso en las partidas más dinámicas ha respondido con una eficacia del 100%. Esto es gracias a su ultrapolling de 1000 Hz y la velocidad de respuesta de 1ms, con la que cumple correctamente.

Si aún falta algún detalle más para estar convencido de la gran precisión de este periférico inalámbrico, podemos echar un vistazo a su sensor dual HG de 6.400 DPI; una cifra que supera la de muchos otros ratones cableados y que, aunque por sí sola no sería decisiva, si lo sumamos al párrafo anterior obtenemos la gran calidad que rodea a este periférico.

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Si entramos un poco más en profundidad en su sensor dual HG, comprobaremos que no son totalmente idénticos, pues el Razer Mamba incorpora un sensor óptico y otro láser, para conseguir con ello recoger el movimiento sobre prácticamente cualquier superficie, evitando cualquier tipo de error en las comunicaciones con el equipo al que esté conectado.

Por si todo esto no bastase par demostrar la calidad de este periférico, Razer ha incorporado una batería con una duración de hasta 16 horas en partida, y no es lo típico que se dice que luego acaba reducido a la mitad, pues he comprobado el número de horas que el ratón es capaz de aguantar en funcionamiento a buen ritmo, y si no son 16, se queda en 15 horas y media. Eso sí, a la hora de la verdad casi nunca tendréis que llegar al límite de la batería, puesto que tras jugar se puede dejar cargando en el soporte que incluye.

Como último detalle de este apartado, si necesitáis jugar más de las horas que permite la batería de forma continuada, Razer ha pensado en eso, y permite conectar directamente el ratón al cable de alimentación, para así no tener que interrumpir la partida más que el tiempo que tardemos en conectar el cable directamente al ratón.

Ergonomía

A primera vista quizás pueda parecer un ratón del montón, comodidad media, algo que cualquier mano pasaría por alto. Pero una vez lo pruebas te das cuenta que nada tiene que ver, que se trata de un ratón bastante ergonómico. A pesar de estar diseñado para manos no demasiado grandes, no resulta molesto si tu mano es algo mayor, y además permite realizar largas sesiones de juego sin sentir cansancio gracias a su forma curvada.

La parte superior del ratón resulta muy agradable al tacto, algo que se agradece si vas a pasar muchas horas utilizándolo. Además, cuenta con una superficie de goma para apoyar el pulgar de la mano, lo que permite que toda la mano repose sobre el ratón de forma adecuada.

Quizás lo único negativo hasta ahora podría ser la suavidad de los botones, que no tiene porqué serlo del todo una vez nos acostumbremos, pero al principio podrían darse algunas pulsaciones erróneas. Según vaya pasando el tiempo (a mi me costó un par de días) te acostumbras a la suavidad de los botones y dejarás de sufrir pulsaciones erróneas.

En general se trata de un ratón muy cómodo, cuya única pega es que debes acostumbrarte un poco a él en cuanto a presión, puesto que sus botones son más suaves que los de la mayoría de los ratones. Por lo demás, la mano reposa bastante bien sobre la superficie del Razer Mamba, así que nada más negativo que destacar excepto que solamente resultará útil a gamers diestros, ya que no existe ninguna versión para zurdos.

Diseño

Ya he comentado mis impresiones sobre el envoltorio del producto, algo que Razer siempre cuida hasta el más mínimo detalle y en esta ocasión no ha sido menos. El ratón sobre el pedestal, cubierto por una superficie de metacrilato transparente, con los cables ocultos en pequeños cajones de cartón…una idea bastante original para aprovechar la ausencia de cables.

Si nos fijamos en su tamaño, 115 mm de alto x 68 mm de ancho x 43 mm de alto, podemos observar que no se trata de un periférico que destaque por su tamaño. Pero aún así no se queda pequeño, es parte de su encanto, ya que Razer lo ha creado así a propósito, permitiendo destacar la curva superior del ratón donde por cierto podremos encontrar el logo de Razer.

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Si observamos el ratón en detalle, podremos encontrar cuatro botones en su lateral izquierdo, que podremos configurar para que cumplan las funciones que deseemos (dos de ellos vienen configurados por defecto para ajustar los DPI del periférico). Estos botones no son los únicos cuya función puede definirse, pues todos los botones del Razer Mamba pueden ajustarse. Junto a estos botones se encuentra el indicador de batería, con tres LED que se iluminan según la carga de la misma.

Quizás uno de los detalles que más llama la atención del ratón es su retroiluminación, pues tanto la rueda del ratón, como la base de carga y estación inalámbrica se iluminan del mismo color, que pueden elegirse entre dieciséis millones de colores. Aunque pueda parecer obvio tras el resto del análisis, el cambio de color se produce de forma inmediata en el ratón, aunque esté conectado de forma inalámbrica.

Ya que se ha mencionado la base de carga y estación inalámbrica, decir que se trata de un dispositivo bastante agradable a la vista también. Por otro lado no es algo que sorprenda, pues Razer no suele dejar nada de diseño al azar, y eso se nota. Además de incluir luz propia, con posibilidad de elegir entre 16 millones de colores, incluye un logo de Razer y un cuidado color negro liso y brillante.

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Jose Antonio Marín López

Gaditano de 21 años. Programador web y estudiante de Programación de videojuegos. Adicto a jugar en PC y a la lectura.

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