El titular no debería pillar a nadie por sorpresa. Independientemente de la veracidad de las fuentes (en este caso la información proviene del Wall Street Journal), solo hay que echar la vista al catálogo de portátiles de Nintendo para saber de su afición por llevar al mercado nuevas versiones de sus plataformas (solo de Nintendo 3DS se cuentan 6 modelos).
En base a esta información, en las oficinas de Tokyo se estaría discutiendo los puntos a mejorar en la actual Nintendo Switch con el fin de sacar a la venta durante el próximo verano de 2019 una revisión de la misma. Ya durante su salida, se pudo observar en redes peticiones tales como cambios en los componentes de NVIDIA para acercarla a sus competidoras directas, reducir el marco de la pantalla para aprovechar mejor el espacio y otra clase de sugerencias. Parece ser que las mejoras con respecto al software y hardware aún son motivo de debate, y que los cambios más probables estarían orientados a la mejora de la pantalla (seguiría sin emplear tecnología OLED) con elementos habituales en las de tipo LCD de teléfonos móviles, logrando así mejoras en el brillo, grosor y gasto energético, repercutiendo esto último en la autonomía de la consola sin estar conectada al dock.
Pese a ser rumores, este movimiento podría estar motivado en parte debido a no cumplir las altas expectativas de ventas que la propia Nintendo instauró en sus previsiones para el segundo año de vida de la híbrida. Aunque no anda escasa de títulos gracias al gran apoyo que suponen los nindies, es cierto que tras una buena racha en la primera mitad de año se siguen echando en falta novedades sobre Metroid Prime 4, Bayonetta 3 y otros grandes juegos anunciados que podrían atraer nuevas ventas.
Con todo esto, solo queda esperar a que Nintendo se pronuncie sobre los rumores, pero en vistas de lanzamientos como Pokemon Let’s Go, Eevee!/Pikachu! y Super Smash Bros. Ultimate (con sus respectivas ediciones especiales, consola incluida), quizá esas declaraciones se hagan de rogar más de lo deseado.