Los que ya tienen unos años recordarán juegos como Afterburner, 1942, R-Type, etc., que no solo estaban en las recreativas, sino que también se pudieron disfrutar en las consolas domésticas como SNES o Megadrive. Para los que nacieron a mediados y finales de los años 90, estos juegos no son tan conocidos, si acaso versiones modernas como Ikaruga o Touhou.

Estos juegos anteriormente mencionados eran y son juegos de scroll vertical o lateral en el que una pequeña nave que elimina a todo un ejército recogiendo power ups para aumentar el nivel de potencia para matar más rápido.

• Plataforma: PC
• Desarrollador: Kot in Action Creative Artel
• Distribuidor: Kot in Action Creative Artel
• Fecha de lanzamiento: 11 de mayo de 2011
• Género: Acción, Indie
• Precio: 4,36€ con el The Brutal Bundle (Bundle Star)

Steel Storm: Burning Retribution ha sido creado por Kot-in-Action Creative Art y distribuido vía Steam, Desura y Ubuntu Software center, y que salió a la venta en dos capítulos; el primero en septiembre de 2010 y el segundo en mayo de 2011. Su género tira más a shooter, pero tiene cierto aire a esos juegos mencionados anteriormente.

Historia

Steel Storm: Burning Retribution no tiene una historia que está presente continuamente. Sin embargo, cada campaña cuenta con un pequeño resumen que explica un poco la misión que se va a llevar a cabo y cómo se ha llegado a esa situación. Además, cada campaña tendrá sus propios escenarios, que casará de cierta forma con esas breves explicaciones que dan.

Jugabilidad

Puesto que el vehículo que se manejará durante el juego es un aerodeslizador con una armadura y potencia de fuego de un tanque, el control es bastante cómodo, a pesar de que los aerodeslizadores tienen la fama de ser bastante incontrolables, y da la posibilidad de guiar al vehículo con bastante facilidad.

La cámara estará casi siempre ubicada desde arriba -es decir, posee una cámara cenital-, además de ser muy personalizable, pudiendo configurarla para que se vea desde arriba o en perspectiva, y esté estática o en movimiento. Con el teclado se moverá el aerodeslizador en las cuatro direcciones de las rosa de los vientos, mientras que con el ratón se orientará lo que es su cañón y la dirección.

Haciendo click izquierdo en el ratón el vehículo dispara sus armas, en principio de una capacidad de destrucción muy limitada, pero a medida que se avance en el juego se irán recogiendo nuevas armas para potenciar aún más su poder ofensivo y haciendo que los enemigos duren cada vez menos. Con el botón derecho del ratón se dispondrá de un potencial bélico algo mayor, pero para poder usarlo primero habrá que conseguirlo. Este arma secundaria tendrá un tiempo de enfriamiento al usarse, al contrario que la principal que no tendrá.

Pero el armamento no se queda ahí, ya que también hay una tercera arma, un arma especial, que puede ser lanzada al pulsar espacio siempre y cuando se haya conseguido antes. No obstante, la peculiaridad de las armas es que las débiles se pueden combinar entre sí, disparando ambas a la vez.

Asimismo, existe una gran variedad de armas: cinco armas primarias divididas en dos grupos (balísticas y energéticas), otras cinco armas secundarias que se dividen igual que las primarias y, por último, el arma especial de la que he hablado previamente.

El objetivo de todas esas armas no es ni más ni menos que los enemigos. Hay de bastantes tipos, pero básicamente son tanques que aguantan bastantes disparos. Estos tanques se moverán para tener el mejor ángulo de disparo, e incluso a veces se cubrirán con los objetos del escenario. También habrá torres fijas que harán la misma función que los tanques, intentar destruir al vehículo, pero con la peculiaridad de que no se mueven; eso sí, tienen bastante potencial.

De vez en cuando aparecerá, en determinadas zonas, un tanque o torreta de mayor tamaño con mayor vida, un arsenal muy potente y mucha armadura. Estos enemigos, como es obvio, tardan un poco más en morir, por lo que aparece una barra roja justo encima de la pantalla indicando su vitalidad.

Para completar el juego no solo hay que llegar al final del nivel, también hay que conseguir la mayor puntuación posible y cumplir una serie de objetivos. Eliminar a varios enemigos a la vez aumentará bastante la capacidad de obtener estos ya que, por un tiempo muy limitado y dependiendo de los enemigos que se eliminen seguidamente, aumentarán estos puntos x2, x3, x4 o x5. Por otro lado, hay muchos cristales que repartidos por el mapa que al recogerlos darán más puntos, los cuales se añadirán al resultado final, aunque al destruir todos los objetos posibles también subirán los mismos.

Para ir avanzando hasta llegar al final del nivel habrá que colocarse encima de ciertas placas para desactivar  los campos de fuerza o barreras que impiden continuar, que a su vez estas suelen estar muy protegidas. Es normal encontrarse cuatro o cinco placas en un nivel y que haya que ir de una punta a otra varias veces en una misma partida.

Tras comentar a los enemigos y las armas disponibles, llega el turno de hablar un poco de las defensas del vehículo que se maneja. Cuenta con un escudo bastante resistente, pero que irá disminuyendo a medida que se reciba daño. La única forma de restaurarlo es cogiendo unos iconos con una llave inglesa en ellos; de esta forma volverá a estar como nuevo para aguantar otro envite enemigo.

Si el escudo llega a cero, el tanque es destruido. Pero no pasa nada, ya que se cuenta con tres vidas adicionales; eso sí, al morir se puede perder un arma.

Además, hay dos modos de dificultad: Arcade, que es el modo fácil, y Clásico, que es el modo difícil. De la misma manera, Steel Storm: Burning Retribution cuenta con modo multijugador, donde en dicho modo se puede hospedar o unirse a un servidor. Hay tres modos de juego:

• Deathmatch. Donde se luchará contra otros jugadores para ver quién es el mejor.
• Campaña. Donde los jugadores cooperarán para terminar las misiones.
• Capturar la bandera. Modo en el cual dos equipos se enfrentan para conseguir la bandera del equipo contrario y llevarla a su base.

Los niveles cuanto más rápidamente se completen más puntuación se obtiene, pero hay que tener cuidado, ya que hay fases en las que ir un poco rápido puede significar “muerte por despeño”, pues los aerodeslizadores aun no saben volar.

También para aquellos que les gusta construir sus propios niveles, Steel Storm: Burning Retribution trae un creador para hacerlos como uno quiera.

Sonido

La música que acompaña durante las partidas es bastante animada, llena a su vez de misterio y en algunas ocasiones pausada, pero la presencia de los efectos de sonido solapan toda esa melodía que hay detrás, haciendo que no se sea significativa a no ser que uno esté pendiente más de la música que del juego. La de los menús es algo más militar, llena de misterio entre sus notas y con ciertos toques de tambores.

En Steel Storm: Burning Retribution las voces son sustituidas por los efectos de sonido. que son sobre todo disparos, eso sí, se puede diferenciar entre cuando es un arma de energía y cuando es un arma balística. Cuando las balas chocan contra los enemigos, estas hacen que estos resuenen tal y como sonaría el choque entre dos placas de metal.

Gráficos

Lo que más llama la atención al empezar a jugar son las texturas que tiene, ya que son unas texturas hechas con Cel Shading, es decir, que parecen dibujos. Esto le da un toque al juego distinto a otros y hace que sea agradable a la vista.

Steel Storm no tarda mucho en cargar los niveles. En estas breves pantallas de carga se verá lo que es el logotipo del juego y en el borde inferior muchas palabras cambiando por instantes. Al terminar de cargar se pondrá una pantalla muy parecida a la Bios o al MS-DOS de cualquier ordenador con muchos comandos, y tras breves instantes se empezará a jugar. Esta es una secuencia incluida en el juego, por lo que no hay que temer por posibles problemas con el ordenador.

El ambiente que rodea las fases está bien delimitado, es decir, se adapta a lo que puede que veamos en un futuro. Existen varios modelos de ambientes como parajes montañosos, parajes helados o bases tecnológicas.

Por otro lado, los menús del juego son muy intuitivos, ya que se parecen a los Sistemas Operativos antiguos. Entre otras opciones cabe la posibilidad de pintar lo que es el vehículo al gusto de cada uno.

Conclusión

Hay que reconocer que Steel Storm: Burning Retribution entretiene bastante gracias a su sistema de puntuación ya que, para los que se pican fácilmente, pueden competir contra ellos mismos.

El nivel grafico no esta mal. El modelo de Cel Shading es una técnica que no se aprovecha mucho en otros juegos y hay que decir que queda bastante curiosa. La IA es bastante fastidiosa en modo clásico (difícil), aunque es cierto que para los jugadores más experimentados será como un paseo por el campo. Quizás lo que mas pueda cabrear del juego es el perder las armas que se recogen en el nivel tras una muerte y no poder recuperarlas.

En el ámbito sonoro no destaca mucho, solo los efectos de sonido comentados anteriormente son realmente algo destacable; quizás le hubiera venido bien una banda sonora  un poco más cañera, como la de los shooter que se han comentado en la introducción. También una de las cosas que le añade diversión es la posibilidad de crear tus propios mapas, de esta forma uno mismo puede hacer el mapa más genial para intentar superarlo una y otra vez hasta la saciedad o ir mejorándolo poco a poco hasta que sea imbatible.

Podéis adquirir Steel Storm: Burning Retribution mediante el llamado “The Brutal Bundle” de Bundle Stars. Junto a él se encuentran otros nueve juegos como Tropico 4, King Bounty Legion o Port Royale 3 entre otros, por lo que, por apenas unos 4,38€, os haréis con un pack que vale más de 180€. ¿No creéis que merece la pena?

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