Análisis Metal Gear Solid V: Ground Zeroes

Plataformas: PS4, Xbox One, PS3, Xbox 360.

Plataforma usada para el análisis: PS4.

Precio: 29.99 € (19.99 € versión digital). 

Desarrollador: Kojima Productions.

Distribuidor: Konami.

Fecha de lanzamiento: 18 de marzo de 2014.

Género: Acción, sigilo.

Idiomas disponibles: Inglés (voces), español (subtitulos).

Tenía razón Kojima cuando decía que Metal Gear Solid V sería el proyecto más maduro que haya realizado en su historia con la legendaria franquicia. Según Kojima, a pesar de los más de 25 años de historia de los videojuegos, el sector aún está muy lejos de alcanzar la seriedad que podemos apreciar en la literatura o el cine. Si por algo se ha caracterizado Metal Gear Solid es por su toque cinematográfico y por sus argumentos profundos, sin embargo, Kojima piensa que todavía no ha conseguido alcanzar la madurez plena en su saga.

“Eso es precisamente lo que quiero intentar abarcar con mi próximo proyecto, Ground Zeroes. Voy a poner en la mira muchos tabúes, muchos temas maduros”, decía el creador japonés, agregando que sería una jugada arriesgada que podría poner en peligro la salida del juego. “Y aunque lanzara el juego, quizá no se vendería bien debido a que sería demasiado. Pero como creador, quiero tomar ese riesgo. Como productor, es mi trabajo intentar y hacer que un juego se venda, pero me estoy acercando al proyecto desde el punto de vista de creador donde le doy prioridad a la creatividad antes que a las ventas”. 

Desde Tecnoslave pensamos que Kojima ha cumplido con sus palabras: el director nipón ha apostado por una creación endurecida. Ground Zeroes es, sin ninguna duda, el Metal Gear más oscuro, crudo y desgarrador de toda la saga. La climatología en la que se desarrolla la misión principal, con tormenta y escenario nocturno, apuntala estas sensaciones. La atmósfera de la que hablamos se refleja también en otros detalles que podemos ejemplificar con un contraste que se da en el caso de “Chico”, uno de los personajes que ya aparecían en Peace Walker. El “Chico” que conocimos en el título anterior irradiaba energía y alegría, mientras que en esta entrega le veremos sombrío y en una situación de sometimiento extrema. Decir también que es la primera vez en la saga que manejamos a un Snake desprovisto de bandana, no es casual, Naked Snake se desprende de la cinta en el pelo para dar un salto evolutivo en su desarrollo y consolidación como Big Boss. No olvidemos que el personaje tenderá a oscurecerse, y tenemos la sensación de que en Metal Gear Solid V va a darse la transformación más profunda del personaje, algo que ya podemos entrever en el prólogo.

La seguridad de Militaires Sans Frontieres se ha visto comprometida

“Olvidaremos nuestros países. Dejaremos atrás las patrias para ser uno con la tierra. No tenemos nación, ni filosofía, ni ideología. Iremos a dónde nos necesiten. No lucharemos por un país, ni por un gobierno, pero sí por nosotros mismos. No necesitamos un motivo para luchar. Luchamos porque somos necesarios. Somos el arma de disuasión de los que no tienen otros medios. Somos soldados sin fronteras, la era en la que vivimos define nuestro objetivo. En ocasiones tendremos que vendernos y vender nuestros servicios. Si los tiempos lo piden, seremos revolucionarios, criminales o terroristas. Y sí, probablemente vayamos directos al infierno, pero, ¿qué lugar es mejor que este para nosotros? Es nuestro único hogar. Nuestro paraíso y nuestro infierno. Esto es Outer Heaven.”

Big Boss - Metal Gear Solid: Peace Walker

Peace Walker nos narraba una página importante en la vida de Big Boss. En ella, pudimos ver el nacimiento de su propia organización de mercenarios, a la que se le puso el nombre de Militaires Sans Frontieres (MSF), grupo predecesor de Outer Heaven. Big Boss no está solo en su creación, Kazuhira Miller (Master Miller en MGS1), es su mano derecha en la construcción de ese sueño; podría decirse que Miller se encarga de la gestión del negocio.

“Algún día, esta empresa de mercenarios que hemos construido será una fuerza motriz de la economía mundial. La guerra fría no va a durar para siempre, antes o después dará lugar a una era de conflictos regionales y terrorismo. Un cambio de paradigma del anticomunismo al antiterrorismo. En esa nueva era, los ejércitos no dependerán de los estados y la guerra será un negocio. Ofreceremos un servicio valioso y tendremos clientes de todo el mundo que necesiten nuestros servicios. MSF es solo el principio. Estamos creando una auténtica revolución”.

Kazuhira Miller – Metal Gear Solid: Peace Walker

En el final de Peace Walker pudimos ver la consecución de ese sueño, la consolidación de MSF. Es en este punto en el que tiene lugar Ground Zeroes. La seguridad de MSF se ha visto comprometida: dos miembros relevantes, “Chico” y Paz, han sido capturados y están recluidos en el campamento Omega, una base militar estadounidense en territorio cubano, donde están siendo interrogados. El temor y corazonada de Big Boss, de esta manera, se cumplen:

“Ahora estamos en el radar de los servicios de inteligencia y los gobiernos del este y del oeste. Probablemente todo el mundo nos conozca. Somos un ejército sin bandera, no debemos tomar partido en disputas internacionales, pero lo hemos hecho. Nos perseguirán. Hemos desestabilizado el equilibrio de poder mundial. No tardarán en venir a buscarnos, ya no hay vuelta atrás. Somos una herramienta del viejo sistema de disuasión y, mientras no cambien los tiempos, vamos a hacer mucho ruido. La caza ha empezado, Kaz, y todo el mundo va tras nosotros. Reúne a los hombres.”

Big Boss - Metal Gear Solid: Peace Walker

Hay que intervenir antes de que se descubra el secreto de MSF: su verdadero potencial nuclear. Aquí es donde entra en juego Snake, que tendrá el objetivo de infiltrarse en la base para rescatar a Paz y a “Chico”.

Como podéis ver, el argumento de Peace Walker es clave para poder seguir la trama del juego. Es más, diría que Ground Zeroes es la conclusión de Peace Walker. Si os lo podéis pasar antes, mejor. Para los que no tengan tiempo os recomiendo que veáis las cutscenes en youtube, merece la pena, pero si sois más vagos que la chaqueta de un guardia, no os preocupéis porque tenéis un escueto resumen en el apartado de antecedentes.

Podemos decir que la historia que nos cuenta el prólogo es sencilla, pero profundamente impactante. Kojima no solo dirige sus juegos, también se encarga de los guiones, que suelen ser soberbios, en este caso tampoco se queda corto. Os aseguro que como viváis la historia de Ground Zeroes se os hará dura la espera de The Phantom Pain.

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