Análisis Hitman Absolution

Vuelve la elegancia. Vuelve el Agente 47

Han pasado ya unos cuantos años desde que vimos por última vez al Agente 47 en nuestras consolas, en la ya para muchos casi extinta PS2, PC, y para muchos que también lo recordarán, en los inicios de XBOX 360. Algo más de 10 años tiene uno de los individuos más sigilosos y mejor vestidos del mundo de los videojuegos, y su trayectoria nunca ha decaído a lo largo de este tiempo, dejando siempre juegos de alta calidad, con una potente propuesta y una sólida jugabilidad. Matar es algo muy típico en los videojuegos, pero llevarlo a un arte es algo que pocos saben.

  • Plataforma: PS3/Xbox360/PC
  • Desarrollador: IO Entertainment
  • Distribuidor: Eidos Interactive
  • Fecha de lanzamiento: 20 Noviembre 2012
  • Género: Acción / Sigilo
  • Idioma: Voces y subtítulos en castellano

Es por ello que el 20 de Noviembre del pasado año, IO Entertainmentlanzaba al mercado la cuarta entrega de esta saga. Hitman Absolution mantiene la continuidad de la saga y se vale de las bases asentadas en las entregas previas. Pero no se queda ahí, sino que va más allá, incluyendo cambios que extienden a la simple mejora visual. La espera ha valido la pena y Absolution ofrece una campaña larga cuya historia coge mucho peso. Mucho sigilo, muchas posibilidades de llevar a cabo los objetivos, y nuestras Silverballers y el cable de fibra, serán las armas con las que contaremos para poder superarlo.

Ella daba anonimato, yo vendía perfección

En el propio video opening del juego se nos pone en antecedentes de la situación a la que nos vamos a enfrentar. Sin interés de realizar ningún destripe de la trama como viene siendo costumbre, solo queda decir uno de los elementos importante es el cambio de nuestro enemigo. La Agencia va a por nosotros, y no será nuestro único enemigo. En Hitman Absolution se acabaron los encargos de “llega a este edificio, mata al enemigo y sal por la puerta para recibir tu recompensa”. La historia coge una gran fuerza, y con un potente y oscuro guión entre manos, el Agente 47 tendrá ante él uno de los desarrollos más complicados de su vida. Ya no está la Agencia para cubrirle las espaldas, no sabrá en quién se puede confiar y en quien no, e incluso ya no cuenta con su clásico maletín para sacar una herramienta que le permita solventar esa complicada situación que tiene ante delante. El Agente 47 llegará a dudar incluso por momentos sobre si lo que hace es lo correcto, llegando a ponerse a prueba su determinación.

Como ya hemos comentado, la historia es larga y profunda, pudiendo fácilmente ésta llegar a las 15-20 horas la primera vez que la juguemos. Esto dependerá principalmente de la dificultad, la manera en que juguemos los escenarios, así como un elemento característico para los más fans de la saga y de lo que nos hemos valido desde aquel primer Hitman, la suerte. Sin embargo, una vez finalizada la primera ronda es cuando empieza lo bueno. Ya conocemos los escenarios, ya sabemos a qué nos enfrentamos y cumplir el objetivo principal de la misión es lo de menos.

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La gran cantidad de objetivos secundarios que se nos plantean dan para mucho, desde muertes características, coger pruebas, encontrar los distintos elementos del escenario que se pueden usar, desbloquear trajes, superar los escenarios de una manera determinada, etc. Cumplir todos esos objetivos dan para rato y para todo el que se quede con ganas de más tendrá alicientes suficientes para seguir, dada la alta cantidad de maneras que se disponen para superar cada escenario.

Por otro lado contaremos con distintos modos de dificultad, divididos en dos bloques. En un primer bloque contamos con los modos de dificultad fácil y normal, donde la cantidad de enemigos es baja y las ayudas para superar las misiones se nos muestran. Modos totalmente recomendables para la primera ronda de aquellos jugadores con menos experiencia, o incluso los que aterricen por primera vez en la saga. En el segundo bloque las cosas se ponen más interesantes, pues contamos con dos niveles más de dificultad, donde la cantidad de enemigos se va incrementando en cada una, y la facilidad con la que éstos nos descubren. En última instancia, se nos presenta el modo “Purista”. Este modo es para aquel jugador que quiera la experiencia más realista y complicada posible. Como en el propio juego se indica: sin ayudas, sin instinto (que comentaremos más tarde que es), sin indicadores, solo un punto de mira. Y es que en el modo purista no tendremos ningún tipo de pista en pantalla. Solo nos valdremos de la experiencia de nuestras rondas previas, y de mucha, mucha paciencia.

Todo esto se adereza con un correcto sistema de puntuación que evalúa nuestra actuación al superar cada nivel, dándonos puntos por realizar muertes características o ser sigiloso, y restándonos por eliminar a objetivos innecesarios o ser descubierto. Dicha puntuación, como no, nos comparará con nuestros amigos y será un gran incentivo para superar esa zona un poco mejor que la vez anterior

No lo juzgues por lo que haga

La saga Hitman, como muchos ya conocerán y hemos ido adelantando a lo largo de este análisis es una saga centrada en el sigilo. Lo importante es no ser descubierto y cumplir cada uno de los objetivos convirtiéndonos en una sombra para nuestros enemigos. Para ello contaremos con una altísima cantidad de herramientas y habilidades. Por un lado contaremos con la clásica habilidad de movernos agachados, mucho más eficiente que ir de pie en lugares donde no somos bien recibidos, evitando que seamos descubiertos. Contaremos además con la ya más que acostumbrada habilidad de pegarnos a la pared, completada con la posibilidad de poder movernos entre coberturas, realizando movimientos rápidos que eviten que entrar en el campo de visión enemigo.

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Pero ahí no queda la cosa. En cada escenario encontraremos una alta cantidad de objetos que podemos coger e interactuar con ellos. Algunos de estos más clásicos como cuchillos, pero otros más curiosos pero no por ello menos útiles, como lámparas hawaianas o minas de proximidad. Dentro de estos objetos tendremos los que podremos interactuar con ellos, como las minas o radios, los que podremos lanzar para eliminar a nuestros enemigos instantáneamente (destornilladores o cuchillos, entre otros), y luego para estos y todos los demás la clásica funcionalidad de lanzarlo para atraer la atención.

A todo esto se le unen los trajes, aquellos grandes amigos nuestros de los anteriores juegos y que, como no, vuelven de nuevo para hacernos las cosas algo más livianas (si queremos). Al eliminar a un enemigo podremos vestirnos con su uniforme y poder pasar por zonas donde antes lo teníamos más complicado. En este punto hay que tener en cuenta un dato importante. Al llevar un traje, todos los demás individuos del gremio del que vayamos vestidos podrán descubrirnos, por lo que si vamos vestido de obrero, podremos pasar delante de policías tranquilamente, pero tener mucho cuidado al caminar donde haya otros obreros.

Ya hemos citado todos los elementos que nos aportan sigilo, pero en Absolution, aunque no es lo propio, y no es lo más fácil, también podemos solventar las situaciones (algunas por obligación y otras por propia voluntad) por las bravas. Ya sea a puñetazo limpio mediante el uso de QTE, o de armas. Armar jaleo es una posibilidad para salir adelante. A lo largo de cada escenario podremos recoger una gran cantidad de éstas, desde pistolas o subfusiles hasta rifles de francotirador. Con estas podemos iniciar tiroteos en los escenarios, teniendo en cuenta a qué nos atenemos, pues todos los enemigos de los alrededores vendrán a por nosotros, intentarán rodearnos, vendrán refuerzos. El equipo de IO Interactive no planteó el juego para llevarlo a cabo de esta manera, pero si queda claro, que es posible superarlo a tiros.

Sin embargo, en más de una ocasión, los propios enemigos serán los que nos ayudarán. Y es que, aunque la experiencia sigue estando muy cerca a los que sería un juego de sigilo, el ser un juego impide que la misma pueda llegar a ser como tal al 100%. Pongamos un caso. Eliminamos a un enemigo que está en una plaza desde una habitación. Solo hay una puerta para salir de dicha habitación y los policías vienen a investigar. Nos escondemos en un armario. Al llegar los policías investigan toda la habitación menos en el armario, dejándote escapar cuando se cansan de mirar. Son aspectos que no terminan de empañar el resultado, pero que todavía siguen marcando la línea existente entre un juego y la realidad.

Usa el instinto, 47

Una de las principales novedades de Hitman Absolution es lo que los chicos de IO han denominado como Instinto Asesino. Mediante el mismo, podremos identificar la posición y el movimiento de cada uno de los enemigos, identificar a los objetivos clave, los elementos del entorno que podemos usar en nuestro favor, etc.

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Como hemos comentado antes, cuando vamos disfrazados los enemigos del gremio nos podrán reconocer, y el Instinto se vuelve útil en estos momentos, ya que podemos usarlo para pasar por delante de los mismos sin que estos nos descubran durante unos breves segundos, muy útil para superar las zonas más complicadas. La última funcionalidad con la que podemos usar el Instinto se produce a la hora de eliminar rápidamente a varios enemigos. Utilizando el conocido “Tiempo Bala” de Max Payne, el tiempo se ralentizará y se nos permitirá marcar a varios enemigos, eliminando a todos estos rápidamente una vez finalicen los escasos momentos que tenemos para marcarlos.

Cabe decir que el uso del Instinto para cualquiera de las acciones citadas previamente hace que éste se consuma, y que, aunque en las dificultades más bajas se regenera, en las más altas un correcto y apropiado uso del mismo se vuelve necesario si no queremos quedarnos vendidos a la hora de la verdad.

Después de todo, a ésto es a lo que me dedico

En el apartado visual Hitman Absolution cumple de sobra. Una gran cantidad de personajes en pantalla se mostrarán en ciertos escenarios. Muchos elementos en los mismos que le aportan vida en un conjunto global. La sensación de realismo es mucho más alta que en los juegos anteriores. Los efectos de lluvia, explosiones o los propios de las luces de las linternas lucen soberbios. Se nota el esfuerzo dedicado en este apartado por los chicos de IO.

Sin embargo, como punto negativo, algo que sí se nota sobre todo en algunas misiones, es que el tamaño de los escenarios es ligeramente más pequeño, lo cual no es ni mejor ni peor, sino diferente. Del mismo modo, en ocasiones, podemos ver como en escenarios más congestionados, aunque sin decaer del todo, la fluidez si se resiente levemente con respecto a los demás. No son sin embargo para nada puntos que desvirtúen el acabado final, que luce perfecto.

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Por otro lado, en el apartado sonoro nada se le puede reprochar a Hitman Absolution. Como en entregas anteriores, se ha cuidado al mínimo detalle el acompañamiento. Una gran cantidad de melodías suenan en cada nivel, otorgando al momento el sonido que realmente necesita, serio o intenso, lento o rápido. Del mismo modo, los efectos sonoros tampoco se quedan atrás. Explosiones, máquinas, disparos y sonidos varios que en los juegos de este estilo abundan aderezan de una manera soberbia cada minuto de la campaña. Todo esto además se acompaña con un genial doblaje al español tanto en subtítulos como en voces, éstas últimas muy conocidas para ciertos personajes.

Este contrato es diferente

Si hay otro elemento que hace especial a Hitman Absolution, es la inclusión del modo Contratos. En este modo, al principio con pase Online, pero anulado finalmente, crearemos modificaciones en las misiones de la historia. De este modo generaremos desafíos para que el resto de usuarios deban superar la misión de un modo específico. Para crear dichas misiones primero deberemos cumplirlas nosotros, para no crear desafios imposibles.

Para ello se nos pondrán en los escenarios de las misiones. En ellos deberemos marcar objetivos y eliminarlos, si lo hacemos se registrará la manera exacta en que lo hemos hecho (traje, modus operandi,…). Como mucho podremos marcar tres individuos. Una vez eliminados dichos individuos, deberemos salir del escenario por donde deseemos. A partir de ese momento se creará nuestro contrato y los usuarios que lo deseen deberán cumplirlo de la misma manera, o incluso mejorarlo.

Esto, como es lógico, añade un plus aún mayor de duración al juego, que de por sí ya era alto. Al superar misiones de otros usuarios en este modo, ganaremos dinero que usaremos para desbloquear nuevos elementos. El modo Contratos ha sido todo un éxito, y una gran cantidad de usuarios crean diariamente contratos, creando competiciones entre amigos y retos.

Conclusiones

Los fans del Agente 47 llevábamos mucho tiempo esperando su vuelta, y la espera ha valido la pena. Un juego a la altura de lo que se esperaba y de la generación actual. Comenzando por una campaña larga, completa y variada, con misiones variopintas alejadas de lo que se nos tiene acostumbrado y dando una sensación de profundidad en la historia como nunca antes tuvo otro Himan. A partir de aquí comienza lo más interesante, una rejugabilidad inmensa, donde contamos con una alta cantidad de modos de dificultad, tanto para los jugadores nuevos, como para los más avezados o puristas. Misiones con puntuaciones y rankings, desbloqueables, logros, muertes características, pruebas que encontrar, y un largo etcétera esperan a todos los jugadores que quieran seguir exprimiendo esta obra. Las novedades, como el Instinto Asesino, o el modo Contratos, impiden que el juego se estanque en la gloria que fue, como ocurre en otras ocasiones.

Pero no todo va a ser bueno. Fallos en la IA, que aunque no dificultan la experiencia, si que ayudan a que, con un poco de picardía, podamos superar ciertas zonas abusando de los propios errores. La posibilidad de, con habilidad y armas, poder superar los escenarios sin sigilo hace, que, aunque no es obligado, exista la opción de completar zonas de esa manera. Escenarios más pequeños que en otras ocasiones, aunque no por ello peores, y ciertos momentos donde la tasa de frames decae en escenarios con muchos personajes son las pegas que se le pueden poner a este magistral título.

Pese a esto, Hitman Absolution fue uno de los grandes lanzamientos de finales del año pasado. Es un título que, para todo el que no lo haya probado, sea fan o no de la saga, es menester probarlo y ver lo que ofrece en un momento en el que los juegos de tiroteos están a la orden del día. El verdadero asesino ha vuelto, y te necesita para cumplir su absolución.

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Matías Ramírez Ramírez

Ingeniero Superior en Informática en la Universidad de Córdoba y actualmente residente en la capital española. Gamer hasta la médula, a lo que le llevo dedicando mucho tiempo desde que tuve mi primera Mega Drive. Amante de la música, emprendedor e iniciado en el mundo de la consultoría de negocio. El porcentaje restante me dedico a ser analista en Tecnoslave. De pequeño me definieron en la frase "Si no gana, no es Matías" y quizás tengan razón.

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