Hace unos días Nippon Ichi Software America (NISA) ha anunciado que el esperado Disgaea D2 tendrá su lanzamiento en otoño de 2013. Se podría decir que todo lo relacionado con Disgaea es un tanto “peculiar”, y los que la conozcáis, sabéis a lo que me refiero; para aquellos a los que todo esto le suene a chino, ahí va un pequeño resumen.

• Plataforma: PS Vita
• Desarrollador: Nis America
• Distribuidor: Namco Bandai
• Género: Rol, combate por turnos, SRPG
• Precio: 36,95€
• Versión usada para el análisis: PS Vita

Se trata de una saga de SRPG (Strategy Role Playing Game) ambientada en el Netherworld, un lugar plagado de demonios gobernado por un Overlord.

Se trata de una saga que más que la historia en sí, lo importante es cómo la desarrollan los pintorescos personajes: desde los típicos zombis, pasando por vampiros adictos a comer sardinas; hasta los magníficos Prinny, simpáticos pingüinos con patas de palo que terminan todas las frases en “dood” y que… explotan. Todo mola más con pingüinos que explotan, para qué mentir.

Destaca en esta saga, el mundo del manganime también hace acto de presencia, llegando a encontrar más de una referencia a series como Busou Renkin o Saint Seiya.

Pues bien, el análisis está centrado en el port de PSVita de la tercera entrega de la saga: Disgaea 3: Absence of Detention, dood.

Historia

La historia tiene lugar en la Evil Academy, lugar dirigido por el actual Overlord, el padre de nuestro protagonista Mao. Como no podría ser de otra manera, Mao es un estudiante ejemplar; falta a todas las clases, deja los exámenes en blanco o se dedica todo el tiempo a jugar a la consola y leer manga. Pero como en todo centro educativo, hay alguna oveja descarriada, en este caso hablamos de la enemiga acérrima de Mao, Raspberyl, cuya maldad no tiene límites: ayuda a ancianitas a cruzar la calle, está presente en todas las labores de voluntariado e incluso ¡dona sangre!. Y bueno, imaginaos cómo son los profesores.

La motivación de Mao en esta vida, además de convertirse en el mejor alumno de la Evil Academy, es derrotar a su padre por un simple motivo, por su culpa ha perdido todas las partidas que tenía guardadas. Pero para esto es necesario una cosa que ha visto y leído en todas las series: ser un héroe, aunque claro, todas esas chorradas del amor y amistad no se ajustan al perfil de un gran demonio. Y entre unas cosas y otras, la cosa se complica.

Jugabilidad

La mecánica del juego es simple, acabar con todos los enemigos que hay en el escenario a lo largo de los ocho capítulos de los que consta el juego. Una tarea sencilla si no fuese por las características del escenario o los adorados a la par que odiados Geo Blocks, que dan distintas propiedades a distintas zonas del escenario, haciendo que más de una batalla se nos atragante.

Además de los Geo Blocks, tenemos que tener muy bien elegido el tipo de personaje que queremos usar, así como su equipamiento, ya que solo podremos usar diez personajes por pelea. Encontramos dos tipos de personaje: humano y monstruo, cada uno con sus peculiaridades. Mientras que los humanos pueden usar hasta siete tipos de armas distintas (puños, espadas, lanzas, hachas, pistolas, arcos y bastones) cada una con sus habilidades propias, los monstruos solo pueden usar dos tipos (uno centrado en ataque y otro centrado en magia). Por otra parte los humanos pueden formar torres con su compañeros (o incluso enemigos) y lanzarlos si es necesario, esta es una de las características peculiares de la saga Disgaea. Pero no son todo ventajas para los humanos, los monstruos pueden convertirse en armas mediante la opción Magichange, lo que da una ligera ventaja en ciertas ocasiones.

Una de característica exclusiva del juego respecto al resto de entregas de la saga es el Skill Merge, con el cual podremos combinar dos habilidades para poder hacer más daño a los enemigos, o que ellos nos lo hagan a nosotros.

El juego cuenta con una gran cantidad de clases a la hora de crear los personajes, dando más variedad en el estilo de juego de cada uno, pero si no os gusta crear, no os preocupéis, porque a lo largo de la historia se unen personajes bastante únicos a la plantilla.

Otros apartados interesantes son el Item World y el Character World, lugares en los que a base de ir completando pisos, mejoraremos objetos y equipamiento o las características de los personajes, respectivamente.

Pero no solo tendremos que emplear la estrategia en los combates, la distribución de nuestros personajes en el aula y la pertenencia de estos a un club y otro, nos dará ciertos beneficios en combate o nos permitirá comprar otro tipo de equipamiento en las tiendas, aunque claro, para desbloquear estos clubs es necesario convocar un referéndum, y es que estos demonios son muy democráticos, a no ser que no obtengamos el resultado deseado, en cuyo caso la cosa puede llegar a desmadrarse “un pelín”.

Respecto a la versión de PSVita no hay muchos cambios, en cuanto a controles, simplemente la posibilidad de usar la pantalla táctil para mover la cámara por el escenario y la utilización del panel trasero de la consola para aumentar o disminuir el zoom y saltar las escenas de las habilidades, lo cual resulta muy molesto si aún no te has acostumbrado a coger la consola sin tocar el panel (más de una vez he visto aumentar y disminuir descontroladamente el zoom); aunque por suerte esta función se puede desactivar.

Gráficos 

En este apartado hay que destacar una gran mejoría de los mismos respecto a la versión de PS3, habiéndose suavizado los sprites, pero sin llegar al nivel de Disgaea 4: A Promise Unforgotten, el cual supuso un lavado de cara para la saga, así que no esperéis unos escenarios preciosos llenos de lucecitas por todos lados y Prinnies bailando a la luz de la Luna, bueno esto último tal vez sí.

Respecto al diseño de personajes, hay que admitir que la saga ha sabido ir evolucionando, de aquellas caras aplanadas de Disgaea: Hour of Darkness quedan pocos restos, y la paleta de colores ha ido pasando de un tono oscuro a colores más vivos.

Sonido 

Como todo en este mundo, la banda sonora tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. He de decir que muchas de las canciones de los escenarios son las mismas, pero, por suerte, han sabido combinarlas para que no sea lo suficientemente machacante, salvo en el Item World y Character World, donde la música cambia cada 10 pisos. Al menos existe la opción de cambiar la canción, aunque para ello tendremos que desbloquearla antes. Pero no solo hay canciones instrumentales, otros temas que suenan en momentos específicos del juego cuentan con cantante (aunque claro, al cantar en japonés, poco se entera uno).

Ya que mencionamos que las canciones están en japonés, también hay que decir que el juego cuenta con audio dual, es decir, que si os apetece escuchar a Hiro Shimono (voz de Emil en Tales of Shynphonia 2 [Wii], Zephyr en Resonance of Fate [PS3 y Xbox 360]) cuando hable Almaz, podéis hacerlo.

 Conclusión

Disgaea 3: Absence of Detention no se trata de un simple port. Junto con las novedades respecto su versión de PS3, esta cuenta con todos los DLCs que salieron en su momento, así como varios capítulos extra y personajes que no aparecieron en Disgaea 3: Absence of Justice, (incluso Fuka y Desco de Disgaea 4: A Promise Unforgotten tienen su aparición estelar).

Por otra parte nos encontramos ante un juego que rompe los cánones de estos tiempos en los que estamos acostumbrados a jugar juegos que no duran más de 8 horas, de las cuales 7 y media son puro vídeo, 15 minutos son quick-time events y 5 minutos de tutorial. La posibilidad de subir a nivel 9999 y la gran cantidad de contenidos post-game, hacen que la experiencia de juego se alargue muchísimas horas más (como dato anecdótico, he jugado 47 horas y solo estoy a nivel 1500, con capítulos de post-game aún sin completar), por no hablar de los distintos finales del juego, lo que lo hace bastante tentador a la hora de rejugarlo, eso sí, manteniendo los personajes creados así como sus estadísticas y equipamiento.

En resumen, por lo endemoniadamente gracioso que es y lo bien desarrollada que está la historia, el juego merece ser un must-have si eres usuario de PSVita. No sirve la excusa de que el juego está en inglés, porque se trata de un inglés tan sencillo que incluso solo sabiendo conjugar el verbo to be es entendible.

¡¡¡¡DOOD!!!!

[analisis imagen=”https://tecnoslave.com/wp-content/uploads/2013/03/Disgaea-3-Absence-of-Detention-6-e1363469930192.jpg” jugabilidad=”9″ historia=”9″ graficos=”7″ sonido=”8.5″]