Opinión V Salón del Manga y la Cultura Japonesa de Murcia

Los pasados días 15, 16 y 17 de noviembre tuvo lugar en el Auditorio y Centro de Congresos de Murcia el evento Murcia seRemanga, que no es otra cosa que el V Salón del Manga y la Cultura Japonesa de Murcia. Como es costumbre, un gran números de adeptos a la cultura otaku, los videojuegos y visitantes casuales se reunieron en el lugar citado en pos de pasar un buen día o fin de semana, en el caso de algunos.

El evento en cuestión contaba con un sinfín de actividades lúdicas cuya finalidad no era otra que satisfacer a los visitantes, enriqueciéndolos culturalmente o simplemente ofreciendoles el máximo grado de diversión posible.

Entre los concursos ofrecidos podíamos hallar karaoke, dance, dibujo, anisong… ¡y por supuesto los clásicos concursos de cosplay! No faltaron los conciertos, ya que estuvieron presentes diversos artistas ya conocidos por muchos en este evento. White Noise, Málaga Brass, Ruki Chan y Haru Ookami deleitaron a los presentes con su amplio repertorio de temas apto para todos los gustos.

La organización de talleres ofrecía también gran diversidad, desde origami hasta soft combat pasando por un gran número de actividades relacionadas con la manufacturación de cosplay, la introducción a diversas artes y el aprendizaje de juegos tradicionales. En cuanto a charlas y conferencias no hubo tanta variedad, pero Jesulink, League of Legends, la Historia de Japón y otras muchas, como la Conferencia de Estudio Ghibli pudieron encontrar un hueco para exponer al público.

La zona gamer estuvo a cargo de Fangames, que  preparó torneos de videojuegos como Pokémon X e Y y Naruto Ninja Storm 3 y dejaron a los jugadores muy satisfechos con la organización. Las diversas exposiciones y actividades que se llevaron a cabo ofrecían gran diversidad y se adecuaban al gusto del que más y el que menos. También había un número decente de Stands de venta e información, entre los que resaltaban el de Fnac y el de Jesulink, por estar presente el propio autor y contar con firmas, merchandising y una versión beta de Manochan Fighters 2.

Pero por desgracia, a pesar de contar con un número de actividades apropiado y aptas para todos los gustos, hubo una serie de problemas que impidieron el total disfrute de este evento, los cuales son los culpables de que ahora mismo estés leyendo un artículo de opinión en lugar de los estipulados con contenidos del salón.

Pese a que, por lo general, este tipo de convenciones suele tener una calidad creciente con los años, en esta ocasión ha sufrido un descenso en calidad con respecto al del año pasado por un motivo muy simple: la falta de previsión. En diversas fuentes de información, los organizadores prometieron un salón espectacular, que superaría con creces al de Cartagena. Los peligros de publicitar hasta la saciedad algo y vender el producto antes de tenerlo pueden ser, entre otros, que tengas demasiado éxito. Y es que la expectación causada provocó un aforo mucho mayor del habitual, con la consiguiente masificación del evento.

Era frecuente ver situaciones de gente desconsolada, porque habían venido de muy lejos y se habían encontrado que no había entradas cuando horas antes en la web no había ningún aviso. Un aforo completo como el de este Salón del Manga impedía disfrutar lo más mínimo de él, ya que al mínimo descuido habías perdido a tu hermano, tu pareja o a tu amigo entre la muchedumbre. El espacio resultaba claustrofóbico y el recinto  era demasiado pequeño y salir fuera resultaba un suicidio por las colas inmensas para volver a entrar.

En mi caso, yendo con una entrada comprada un mes antes y con la certeza de que iba a entrar al llegar a la hora de apertura, las 10:00, tuve que esperar 2 horas enteras en la cola hasta poder entrar. “Ha pasado lo peor”, pensé, hasta que nuestros estómagos rugieron pidiendo algo que llevarnos a la boca. ¡Sorpresa! La variedad gastronómica que ofrecía se reducía a puestos de dulces y similares, nada apropiado para un almuerzo decente, por lo que la opción más sensata era salir al exterior del recinto, al puesto de ramen, y pedir ahí. Nuevamente otra sorpresa. Todos los visitantes, los cientos que había, tuvieron la misma idea, osea que… ¡A esperar!

Inocente de mí, volví a pensar que lo peor había pasado, que ahora podría hacer las fotos pertinentes y grabar las entrevistas para nuestro canal de YouTube. Nada más lejos de la realidad, puesto que había que volver a hacer cola (lógico) para entrar al edificio en el que tenía lugar el Salón del Manga. Pero algo no cuadraba. Esperé durante 2 horas y media más hasta que la cola avanzó hasta la entrada del salón. Lo sospechoso era que a nuestra derecha había otra cola que avanzaba considerablemente más rápido, lo que me llevó a preguntarle a un amable transeúnte qué era lo que pasaba.  “Están vendiendo entradas”, me dijo.

Sí, amigo lector, mi experiencia en este Salón del Manga de Murcia se ha visto reducida a casi 5 horas de cola y una fiebre de varios días, por la gran masa de personas y la imposibilidad de descansar en ningún momento. Eso sí, nos llevamos algo muy bueno, ¡y es que Jesulink nos dedicó un poster y un abrazo!

• Rubbendel

  No sé que pasa últimamente en todos los eventos manga que hay unas colas tremendas. En el Salón de Barcelona 4 horas para poder entrar y venta de entradas cerradas, y en el de Valencia de este pasado fin de semana 2 horas de cola también para poder entrar un sábado. Creo que tendrían que poner más atención en esas cosas o la gente se va a hartar..